Este miércoles por la noche y tras ocho horas de discusión, la Cámara Baja aprobó en lo general la Reforma Constitucional que da prioridad a los Estados Unidos Mexicanos para la generación de energía eléctrica.
Esto dará la facultad de que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (PEMEX) se conviertan en empresas públicas.
El objetivo, como lo indica la mayoría legislativa, es “recuperar la soberanía energética”. Por otro lado, la oposición advirtió sobre la creación de “monopolios” que desincentivan la inversión y competencia en el sector energético.
Para poder convertir estas instancias en empresas públicas, se deben reformar los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Cabe destacar que la reforma aprobada en lo general es un lavado de cara de la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica que Morena aprobó en 2021. Sin embargo, la Suprema Corte de Justicia de la Nación la invalidó, pues, contradecía lo establecido en la Constitución.