Guanajuato
La Dirección Municipal de Salud ha detectado que la mayor parte de los negocios y establecimientos, dedicados a la venta de alimentos ya sea en espacios cerrados o calles y vialidades arrojan grasas, aceites y derivados a desagües y alcantarillas.
Muchas de estas sustancias se solidifican y eso ocasiona que los sistemas de desagüe se tapen y ocurran inundaciones aseguró el titular de la Dirección Municipal de Salud, David Donato Garnica, quien recomendó a los comerciantes no tirar las grasas y aceites que ya no utilizan.
Explicó que, aunque no todos muchos de esos productos se solidifican y al juntarse con basura, desechos y hojas crean una mezcla que pueden generar un foco de infección, además de los riesgos de encharcamientos e inundaciones.
El funcionario señaló que, ante la proximidad de temporada de lluvias, los comerciantes deben de evitar este tipo de prácticas que generan otras afectaciones, de las cuales no se hacen responsables y las autoridades tienen que atender los daños.
Donato Garnica apuntó que la limpieza de las alcantarillas es una labor del Simapag, pero a la Dirección a su cargo tiene la función de concientizar y pedir a los comerciantes que eviten arrojar los aceites y grasas a estos espacios.
Los comercios que más incurren en estas conductas son: taquerías y locales de venta de comida preparada, además de puestos en la vía pública que utilizan grasas y aceites en la preparación de los alimentos que ofrecen.
