El torero de casa, Diego Silveti, se lleva el triunfo al cortar dos orejas en la Corrida Revolución para salir en volandas ante la afición fresera, que hizo 3/4 de entrada en este gran acontecimiento taurino.
El escaso juego que brindaron los toros de la ganadería “Campo Hermoso”, estrellaron las ilusiones del torero de Chiva, Enrique Ponce, quien se despedía el día de hoy de la afición irapuatense. Se enfrentó a toros sin fuerza, poco fondo y nulo recorrido, que no le valieron para compensar el cariño recibido por el tendido durante toda la tarde.
Intentó enderezar la tarde al regalar un toro de la misma ganadería, pero no pudo cambiar la suerte despidiéndolo del ruedo con una clamorosa ovación.
Diego Silveti por su parte llegó decidido a triunfar después de haber estado en terapias debido a una ruptura de mensico por la cual atraviesa. Esto no le impidió hacer disfrutar al público con entonada faena a su primer toro “Buena suerte”, que rubricó con gran estocada para cortarle la oreja.
En su segundo astado tuvo mucha voluntad, aunque no encontró colaboración con “Dinastía”. El tercer toro que le correspondía en turno se despitorró de salida y fue regresado a los corrales. Saldría en su lugar el 1er reserva de la ganadería “Peñalba”, que tuvo una gran virtud: movilidad, misma que el Matador aprovechó a cabalidad para desarrollar una emotiva faena, que coronaría con un espadazo, que le permitiría cortar la segunda oreja de la tarde y asegurar la puerta grande.
