
Celaya, Guanajuato
En respuesta a una solicitud formal de la Fiscalía General del Estado y de la Comisión Estatal de Búsqueda, la Policía Municipal de Celaya activó su célula de búsqueda para participar en un operativo conjunto con colectivos de personas desaparecidas.
El despliegue se concentró en 23 centros de rehabilitación, conocidos como anexos, en los municipios de Celaya y Cortazar. Aunque la intervención no permitió localizar a personas reportadas como desaparecidas, permitió estrechar la colaboración institucional con familiares y autoridades estatales. En el operativo también participaron Guardia Nacional, FESPE, Protección Civil y la Procuraduría de los Derechos Humanos.
Como parte del seguimiento, la Dirección de Policía de Celaya informó que sólo 10 de los anexos revisados se encontraban previamente ubicados. Situación que evidencia la operación irregular de muchos centros. Esto motivó la implementación de mesas de trabajo con la Dirección de Desarrollo Urbano para avanzar en la regulación de estos espacios, que muchas veces funcionan sin cumplir con los requisitos mínimos.
Las autoridades buscan reforzar la inspección, identificar a los responsables y evitar que estos sitios se conviertan en puntos de riesgo para la seguridad pública o espacios propicios para violaciones a los derechos humanos.
“Esperemos que continúe esta actividad, es muy importante para que tengamos el acercamiento con esos centros de rehabilitación, posiblemente van a continuar, aquí solamente fueron a 10 centros de rehabilitación, pero seguramente en días posteriores nos dirán otra vez cuándo continúan la búsqueda. Hay más, ¿verdad?, en Celaya, operan más de 10"
Bernardo Rafael Cajero Reyes, Director de la Policía de Celaya
Desde Protección Civil, se explicó que las inspecciones a estos centros se realizan con base en protocolos de seguridad estructural, higiene y condiciones de habitabilidad. La policía, por su parte, verifica antecedentes y reportes de actividades delictivas.
Ambas áreas coincidieron en que estas revisiones deben continuar de forma periódica para garantizar entornos seguros y funcionales para los procesos de rehabilitación.