
En una década Celaya podría desplazar a Irapuato como la segunda ciudad más grande del estado. Esto gracias al proyecto de Morena para convertirla en el Polo de Desarrollo, y a través del cual llegarán decenas de empresas maquiladoras y generarán miles de empleos.
El alcalde Juan Miguel Ramírez también cuenta con el Plan de Obra Pública, en el cual se percibe el paso del Tren de Pasajeros por el centro de la ciudad. Legará a la estación en la Alameda, y detonarán el comercio en el corazón turístico de Celaya.
El resto de los Guanajuatenses vemos con envidia los miles de millones de pesos que la federación invertirá en Celaya para la construcción del Tren de Pasajeros. De todas las obras para transformar a Celaya, considerada su población como los olvidados por el centralismo de los gobiernos estatales.
En 15 años, el gobierno del estado apoyó a León en la construcción de una vía rápida en el Libramiento Norte, lo que ocasionó que la población se trasladara a vivir a dicha zona y la plusvalía subió.
Acueducto Solís
Irapuato también avanzó con dos anillos periféricos, infraestructura que también está ayudando a su desarrollo económico.
Celaya no avanzó prácticamente en nada, lleva 15 años sumergido en la violencia, y ni los gobiernos estatales y federales tomaron acciones contundentes para pacificar la ciudad.
La población pidió un cambio de rumbo y todo parece indicar que no se equivocaron, la Cuarta Transformación le va a hacer justicia a Celaya.
Para finales del 2028 es espera que llegue la primera gota de agua del Acueducto Solís que construirá la federación y el estado a partir de este agosto.
Si los cálculos de los ingenieros del Ejército Mexicano son correctos, en enero del 2029 los celayenses podrán tomarse un vaso de agua que llegará de la Presa Solís, en la Estación de la Alameda, mientras esperan el Tren que los llevará a la Ciudad de México.